La Sangre de mi Espíritu "Bilbao vs Barcelona"


La Sangre de mi Espíritu

Nacido en Bilbao, Miguel de Unamuno perteneció a la “Generación del 98”. Aquella generación de poetas, escritores y ensayistas españoles afectados por la derrota militar de la guerra Hispano-Estadounidense, así como la consecuente pérdida de Cuba, Puerto Rico y Filipinas. Toda una crisis moral, política, social y territorial que sería el punto y final del Imperio Español.

“La sangre de mi espíritu es mi lengua,
y mi patria es allí donde resuene
soberano su verbo, que no amengua
su voz por mucho que ambos mundos llene...”

Si lo que unificó, lo que hoy día conocemos como Estado español, fue la toma de Granada, en 1492, por parte de los Reyes Católicos, expulsando al último Rey Nazarí, así como, por Real Decreto, a los judeo-españoles; el gran motivo del interés por el proyecto denominado España, fue el descubrimiento de América.
Se abrían posibilidades de expansión, obtención de riqueza, oro, plata, productos alimenticios... ¡Todo un mundo por descubrir y repartir!

Un “Estado” de intereses que duraría análogo al sueño de la conquista de “El Dorado”.

Pero, todo tiene un principio y un final, así que con la pérdida de las últimas colonias americanas y asiática, España entró en una crisis económica y moral que dio lugar, en determinados pueblos, al nacimiento de los nacionalismos periféricos. La búsqueda de unos orígenes que devolvieran su orgullo patrio, basada en la identidad de su propia lengua y pasado histórico.

A pesar de que la Marca Hispánica era patente hacia el siglo IX, los hispanos como pueblo y nación son reconocidos desde la noche de los tiempos.

Hispania, palabra de origen fenicio, sirvió para denominar a la península Ibérica (nombre de origen griego), y más tarde los romanos la conservarían, otorgándola a sus propias provincias.

Ya en la Edad Media fueron llamados españoles a todos los reinos cristianos peninsulares, El Rey Jaime I de Aragón (siglo XIII) dijo que sus conquistas serían para la “mayor gloria de España”

Probablemente, hoy día, la nación española se siente más unida o representada por la Selección nacional fútbol (no nos queda otro “Dorado” por descubrir), pero igualmente, este mismo deporte es cauce reivindicativo de aquellos pueblos hispanos que aún conservan su propia lengua vernácula.

Ante el inminente partido que enfrentará a los equipos bilbaíno y barcelonés en la Capital del Reino, y ante la asegurada pitada que recibirá la Corona Española, así como el desprecio del cual será objeto nuestra enseña e identidad; sólo cabe una reflexión:

Al igual que a Unamuno, por su condición de vasco, se le negó el derecho a sentirse español, aludiendo el General Millán-Astray las siguientes afirmaciones: “¡Cataluña y el País Vasco, el País Vasco y Cataluña, son dos cánceres en el cuerpo de la nación! ¡El fascismo, remedio de España, viene a exterminarlos, cortando en la carne viva y sana como un frío bisturí!”


De la misma forma, ningún fascista periférico puede negarnos la condición de españoles ni ser insultados en la tierra que nos vio nacer. Fascistas cuyo único remedio para sus reivindicaciones es la extirpación, con frío bisturí, de la lengua y señas de identidad de España, en una territorialidad mental que ellos han delimitado como “puertas en el campo”

Quizá no haya otro paraíso por descubrir, pero tenemos un tesoro compartido por casi quinientos millones de personas. Una riqueza sin dueño ni Señor. Una identidad que no debe ser pisoteada por una minoría exacerbada. Una sangre que fluye por nuestras venas. Un idioma Universal llamado Español.

Y por si alguien dudaba del sentimiento españolista del vascuence D. Miguel de Unamuno, de esta forma acabó su soneto dedicado a la lengua de la nación hispana diseminada por todo el Planeta:

“...Ya Séneca la preludió aún no nacida
y en su austero latín ella se encierra;
Alfonso a Europa dio con ella vida.
Colón con ella redobló la Tierra.

Y esta mi lengua flota como el arca
de cien pueblos contrarios y distantes,
que las flores en ella hallaron brote,

de Juárez y Rizal, pues ella abarca
legión de razas, lengua en que a Cervantes
Dios le dio el Evangelio del Quijote”.


Pepe Martos.



5 comentarios:

  1. ¡Viva al Barcelona.! Lo digo en español. El deporte no debiera mezclarse con la política, pero bueno no hay que sacar las cosas de quicio como ha intentado hacer la Aguirre.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Vale, lo que tú digas, pero los que politizan el evento son los separatistas vascos y catalanes. Quieran o no lo que están jugando es una Copa de España o del Rey, como queramos llamarla y yo lo tengo muy claro. Antes que ir a pitar y fastidiarla, que no la jueguen. Es incongruente que participes en una cosa que no respetas o no aceptas. Simplemente que no participen en esa actividad. Pero al igual que yo jamás he pisoteado o ninguneado las banderas autónomas de Comunidad alguna, tampoco admito que se tire por el suelo la bandera de España y el Himno Nacional. Cada cosa en su sitio. Faltaría más.

      Eliminar
  2. Mario Floresmayo 24, 2012

    Ante ésta tu reflexión documentada sólo cabe felicitarte por tu mesura, tu compromiso y tu sensibilidad. Enhorabuena amigo Pepe.

    ResponderEliminar
  3. UN ESPAÑOLmayo 25, 2012

    VIVA ESPAÑA Y VIVA LA NACIÓN ESPAÑOLA

    ResponderEliminar
  4. La pregunta es... ¿Qué significa? "Por mucho que ambos mundos llene?

    ResponderEliminar

PUBLICAR SU COMENTARIO SIGNIFICA QUE USTED HA LEÍDO, ENTENDIDO Y ACEPTADO las condiciones del siguiente AVISO LEGAL: CLIQUEE AQUÍ PARA LEERLO.

Todos los mensajes que se envían y publican en los Foros de USO LUCENA son comunicaciones públicas y personales, por lo tanto, la responsabilidad de un posible uso indebido por terceras personas recaerá sobre ellas. Así mismo, la responsabilidad, en caso de alguna Acción Legal, contra alguna opinión o comentario será de la persona que escriba ese texto, cuyo contenido estará a disposición de la Autoridad Judicial Competente que lo solicite.
USO LUCENA se reserva el derecho de no publicar o retirar comentarios A PETICIÓN de la persona que se sienta aludida o por decisión propia de nuestras Secciones Sindicales.
GRACIAS